“El primero te lo regalan, el segundo te lo venden…”, decía una vieja canción del rock nacional. Hace dos semanas, en la previa del arranque del Mundial de Clubes, se hablaba de la baja expectativa por el partido del debut entre el Inter Miami de Lionel Messi y el Ah Ahly egipcio en el Hard Rock Stadium, e incluso se instaló la versión que FIFA estaba ofreciendo tickets por debajo de su precio oficial. Finalmente estuvo casi lleno.
Era la previa del primer partido de Boca Juniors en ese mismo escenario y fueron muchos los argentinos que aprovecharon la estadía en la ciudad para ver en vivo a Messi por 40 dólares.
Hoy la situación cambió diametralmente, y no solamente porque los hinchas xeneizes están encarando el triste camino de regreso a Buenos Aires (quién les quita lo cantado, y lo sufrido).
Sucede que e Inter Miami sorprendió a todos y se metió en octavos de final del torneo de 32 equipos, saliendo vivo de un grupo que tenía a Palmeiras y Porto como grandes favoritos. Ahora le toca cruzarse con el Paris Saint-Germain, campeón de la Liga de Campeones hace menos de un mes: el mata mata ante los de Luis Enrique será el domingo a las 13 (hora argentina) en Atlanta.
En Fort Lauderdale, la casa de la franquicia rosada, no hay manera de palpar la expectativa porque no hay hinchas reales por la calle. Ni siquiera hay calles, y los fanáticos parecen seguir a Messi. Pero la sensación es que se viene un sold out en el Mercedes Benz Stadium, el imponente marco que recibirá la primera vez del 10 argentino ante su ex equipo parisino, del que se fue por la puerta de atrás, abucheado por sus ultras.
El termómetro de lo que se vivirá en Atlanta lo tiene la página web que vende las entradas en forma oficial. A cuatro días del choque entre el 10 y el mejor de Europa las entradas más baratas se venden por encima de los 110 dólares.
Son ubicaciones en la tercera bandeja pero con una vista espectacular del campo de juego techado donde durante el resto del año juegan la NFL, la MLS y hay eventos y shows casi a diario.
El Inter ya jugó allí contra Porto, la noche del golazo de Messi de tiro libre y la primera victoria de un conjunto de la Concacaf contra otro de la UEFA, determinante para la clasificación. Lo vieron en vivo 31.783 espectadores, cuando entraban 70 mil. Esta vez prometen ser muchos más.
¡¡TREMENDO GOLAZO DE MESSI!!
La Pulga y un ESPECTACULAR tiro libre para poner el 2-1 de Inter Miami sobre Porto. #MundialDeClubesEnDSPORTS | #FIFACWC pic.twitter.com/QkLv8mCRXR
— DSPORTS (@DSports) June 19, 2025
Ver a Messi desde cerca, detrás de un arco, cuesta alrededor de 200 dólares, y en mitad de cancha puede superar los 400. Los precios son altos en comparación a los de la fase de grupos, cuando ver un partido de tercer nivel podía costar 20 o 30 dólares, pero están a la par de lo que se verá en los otros cruces de octavos de final, con europeos fuertes y brasileños muy convocantes.
Atlanta es una de las ciudades más conectadas en materia de transporte y Messi convoca más que un club. El show está asegurado. El domingo sólo ofrecerá dos finales posibles: su despedida del torneo o una hazaña con sabor a revancha. A preparar los pochoclos.