la fuerte denuncia del DT de Pumas de México contra hinchas de Independiente, tras perder vs Inter Miami

la fuerte denuncia del DT de Pumas de México contra hinchas de Independiente, tras perder vs Inter Miami

La victoria del Inter Miami ante Pumas de México (3-1) que le dio la clasificación a cuartos de final en la League Cup resonó en Buenos Aires. No solo porque Rodrigo De Paul convirtió su primer gol con la camiseta de las Garzas para la alegría de Lionel Messi -lesionado-, sino también porque el entrenador del equipo azteca denunció que el colombiano Álvaro Angulo recibió amenazas de muerte horas antes del partido en el Chase Stadium de Florida.

Fue el entrenador del conjunto mexicano Efraín Juárez el que aseguró que Angulo fue atacado virtualmente a través de mensajes a su teléfono y correos electrónicos.

“Hoy en la mañana, un jugador mio que jugaba en Independiente, Álvaro (Angulo), recibió amenazas de muerte a su correo y a su teléfono”, dijo Juárez en la conferencia de prensa posterior al partido que marcó la eliminación de Pumas.

“No sé de dónde, pero todo parece indicar que viene de allá (por Argentina)”, aclaró al ser interrogado por el probable origen de los mensajes anónimos.

El entrenador mexicano explicó que el ánimo del futbolista de 28 años estaba muy afectado antes del partido por las supuestas amenazas.

Ángulo se fue de Independiente para fichar con Pumas el 15 de julio pasado, pero esta semana quedó inmerso en un ida y vuelta con el club de Avellaneda, que le respondió a sus declaraciones a través de un comunicado oficial y, además, con la palabra de su presidente Néstor Grindetti.

“Si ellos (por los dirigentes) hubiesen querido quedarse conmigo y contar con mis servicios, creo que desde el principio hubiesen sido claros con la gente y conmigo”, dijo el futbolista en una entrevista brindada a ESPN Colombia.

Estas explosivas declaraciones rebotaron en las redes sociales y ante la trascendencia de las mismas, la dirigencia salió al cruce con un contundente comunicado oficial acompañado del contrato firmado con fecha del 10 de julio en el que se acordó que, tras el pago de 35 mil dólares, ya no se registraba deuda alguna entre la institución y el defensor que fue vendido a Pumas a cambio de 1,5 millones de dólares y el pase de Ignacio Pussetto.

“No me dijo que éramos poco serios. Yo lo llamé una mañana en el predio y le dije ‘Alvaro quiero que te quedes y estoy haciendo todo para que te quedes’. Le habíamos adelantado una cuota de lo que le debíamos y mejorado el salario. Y él me dijo: ‘Presi, yo me siento más cómodo yéndome, me fue muy bien en este semestre y esta es mi oportunidad’. Ahí lo llamé al técnico y le dije que Angulo se iba a ir porque se quería ir y ya no había más nada par hacer. Después me enteré que ya tenía todo arreglado con el club Pumas”, completó Grindetti.