La localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere, en La Matanza, se vio sacudida por el crimen de Nélida Noemí Martínez, la mujer de 58 años que fue asesinada por su hijo, Cristián Noguer, con un hacha. Mientras se esperan los resultados de las pericias psiquiátricas a las que fue sometido el sospechoso, quien padece esquizofrenia y una discapacidad auditiva, se conocieron detalles estremecedores de la autopsia del cuerpo de la mujer.
El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en la calle Beethoven al 4200, en el mencionado lugar del oeste del Conurbano. Tras lo sucedido, Noguer deambuló por su barrio y salió a pedir ayuda con un teléfono en la mano, contexto en el que fue hallado por un patrullero de la Policía Bonaerense. Los agentes del móvil de la Comisaría 1° de Rafael Castillo vieron la foto que tenía en el dispositivo, donde observaba a Martínez decapitada, y procedieron a detenerlo.
El hombre con esquizofrenia acusado de decapitar a su madre con un hacha tenía antecedentes penales
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El hombre, de 34 años, los guió hasta su casa y les mostró la escena del crimen. Su madre estaba en su habitación y el hacha con la que habria cometido el crimen estaba al lado de una puerta, con el mango de madera de casi un metro de largo manchado de sangre. Según lo reportado, la mujer yacía en el suelo y, a pocos metros, se encontraba una parte de su cabeza.
La causa en contra del agresor quedó en manos de la UFI de Homicidios de La Matanza, a cargo del fiscal Claudio Fornaro, que determinó que quedara detenido, acusado de “homicidio agravado por el vínculo”. Tras ser revisado en el Hospital Posadas, el sospechoso más tarde fue llevado a una comisaría, pero quedó alojado en una oficina y no en un calabozo, a la espera de los peritajes.
Qué dice la autopsia de la mujer asesinada por su hijo
Acorde al informe, Nélida fue decapitada desde la nariz, en forma descendente. La mujer recibió no menos de cincuenta hachazos en esa zona de su cabeza, con una parte de ella que continuó adherida a su cuerpo -como la zona del maxilar inferior-.
Por otro lado, se reportó que la fuerza de los golpes atribuidos a Noguer destrozaron la cerámica del piso y uno de los datos que llamó la atención fue la poca cantidad de sangre encontrada.
Esto se debe a que el sujeto primero habría desmayado a su madre a golpes y después la habría estrangulado, motivo por el cual el flujo sanguíneo hacia el cerebro ya había sido interrumpido.
En medio de los exámenes, el fiscal Fornaro recibió los antecedentes penales del acusado, quien tuvo una causa por tenencia de arma de fuego en 2023, que luego fue cerrada. Alli se le hizo una pericia donde se lo diagnosticó con esquizofrenia, la cual indicaba que representaba un riesgo para sí mismo y para terceros.
La evaluación practicada en el Posadas, de forma insólita, no arrojó este resultado. Por eso, el funcionario judicial debió enviarlo a una comisaría, y se optó a que se quedara en una oficina por temor a que se autolesionara. Además, se busca determinar si sufrió un “brote psicótico”.
El sospechoso no declaró, a la espera de las pericias que confirmen su condición psiquiátrica y determinen si tuvo noción de sus actos, lo que definiría su presunta inimputabilidad. También se aguardan los resultados de las pericias para esclarecer completamente cómo se desarrolló el trágico episodio.
Fuentes del caso expresaron que, aunque la relación cotidiana con su madre “no era mala”, existían episodios de violencia aparentemente relacionados a su negativa a tomar la medicación prescripta para su patología. Los vecinos de la cuadra testificaron diciendo que “era una persona agresiva” con su madre e incluso una hermana del joven sostuvo que la mujer la llamó para decirle que él la quería atacar.
FP/EM
