Es difícil valorar qué fue más sorprendente este sábado en Hungría, si la vuelta de Charles Leclerc que colocó a un Ferrari en la pole position por primera vez en lo que llevamos de temporada, o la que se sacó del sombrero Fernando Alonso, que arrancará el quinto este domingo (15.00, Dazn), su mejor posición de arranque del curso, la misma que ocupó en Imola. Si en aquel Gran Premio de Emilia-Romaña ya fue toda una hazaña meterse en la tercera línea de la parrilla, lo de Hungaroring aún tuvo más miga: el asturiano decidió no tomar parte en la primera sesión de ensayos libres, el viernes, para recuperarse de una lesión en la zona lumbar, que se hizo el fin de semana pasado, en Spa.
A pesar de la intención del ovetense de no tirarse al drama, ningún corredor se salta un entrenamiento a menos que sea estrictamente obligado. “Me va a tocar gestionar el confort dentro del habitáculo durante los dos próximos días”, resumió Alonso, tras bajarse del coche en la segunda sesión, en la que finalizó el quinto, dando alguna muestra de lo que podía venir al día siguiente. La sexta plaza que ocupará Lance Stroll, compañero de Alonso en Aston Martin, en la formación de salida deja claro que al bólido verde le gusta mucho más Hungría que Spa, donde el fin de semana pasado se colocó el 19º (Alonso) y el 20º (Stroll).
“El coche fue mucho mejor este fin de semana y tenemos que entender por qué. Hace solo siete días, en la cronometrada en Spa, terminamos el 19º y el 20º. Y ahora estamos el quinto y el sexto, a pesar de no haber cambiado nada”, reflexionó el bicampeón del mundo. “El coche está mucho mejor que mi espalda”, bromeó el español, antes de destacar el acierto de los componentes que se le han ido añadiendo al AMR25, durante un ejercicio en el que la estructura de Silverstone ha estrenado su nueva fábrica, además de haber incorporado a un puñado de ingenieros nuevos.
La cara más reconocible de ellas es la de Adrian Newey, quien, sin embargo, está focalizado en el monoplaza de 2026. “En Imola introdujimos un nuevo paquete de mejoras; en Gran Bretaña metimos el nuevo suelo, y ahora el nuevo alerón delantero, que es muy importante en los cambios de dirección”, relató Alonso, que se mostró menos atónito con su quinta posición que Leclerc tras estrenar su casillero de pole en lo que va de año. Esta es la número 27 de su cuenta particular, y la primera de Ferrari en Budapest desde la que Sebastian Vettel firmó en 2017. “Probablemente es una de las mejores poles de mi carrera, y la más inesperada”, remachó el monegasco, pletórico en un circuito en el que, hasta ahora, nunca había logrado meterse en la primera línea. Por detrás de él arrancarán los dos McLaren, con Oscar Piastri (segundo) por delante de Lando Norris (tercero), como los grandes favoritos a jugarse el último triunfo antes de las vacaciones.